En esta ocasión vamos a hablar sobre cómo podemos sustituir los antojos que a menudo tenemos a lo largo del día y que, como sabemos, se pueden convertir en un problema para nuestra salud.
El miedo a los antojos
Los antojos pueden suponer un importante impedimento para nuestra salud y dieta, pero lo cierto es que también nos pueden ayudar a superar determinados momentos del día.
El caso es que si los gestionamos bien, incluso podemos convertirlos en una fantástica herramienta que nos ayudará a mantener un estado emocional y una salud perfectos.
No obstante, para ello es indispensable que tengamos en cuenta algunos aspectos importantes como el hecho de que dichos antojos pueden ser aptos siempre y cuando los utilicemos a modo de sustituto en nuestra dieta habitual, es decir, siempre que su ingesta no suponga un aumento en el consumo de calorías.
También es importante prestar atención a nuestros antojos, además de educar nuestro cerebro para transformar los bollos y antojos poco recomendables en otros más saludables.
Los antojos permitidos
Por ello, a continuación vamos a detallar algunos de los antojos que podemos utilizar para calmar el estrés y el hambre entre comidas.
En primer lugar, uno de los mejores alimentos para estas ocasiones son las frutas y las verduras, pero los frutos secos también pueden suponer una ayuda fantástica. Incluiremos productos integrales con carbohidratos que nos ayudarán a conseguir energía ingiriendo pocas grasas y azúcares.
Los productos lácteos pueden ser otra opción muy a tener en cuenta, aunque es importante procurar que sean descremados, y siempre analizaremos las calorías ingeridas y las reduciremos a lo largo del día en otros momentos en los que tengamos más energía para hacerlo.
